27.6.11

Mi foto de Ursula

Tras interpretar a Honey Ryder en  la primera   aventura del agente 007 James Bond: "007 contra el Doctor No"  esta actriz de origen suizo se convirtió en icono de belleza y símbolo sexual durante la década de los 60.

Su curriculum interpretativo se reduce a unas 25 peliculas, la mayoría de ellas mediocres. Aunque la intención era convertirla en la nueva Dietrich, lo único que finalmente demostró tener en común con la gran dama era su origen alemán y unas piernas para la eternidad.

Antes del bikini en 1957, Andress decide casarse con John Derek, del cual se divorcia 10 años después cuando Derek comienza a perseguir a una jovencita Linda Evans.

Aún cuando se hizo con el Globo de Oro en 1964 a la mejor actriz revelación por su papel de Honey Ryder, su trayectoria posterior insinúa que se trata de una actriz de talento limitado, sin embargo su poder de atracción sedujo a grandes estrellas de la época, desde Marlon Brando y Jimmy Dean hasta los más tardíos romances con Jean Paul Belmondo, Warren Beaty y Ryan O'Neal le otorgan un puesto de honor entre las maestras de la seducción.

En el año 1994, quiso el destino que me cruzara con ella en lo alto de una de las escalinatas de la Piazza de España en Roma. Era una noche de verano y como cualquiera de ellas en Roma hacía un calor bochornoso.

Iba bien acompañada, recuerdo que la rodeaba un grupo de hombres de buen aspecto y ella era la única mujer; se basta. Deduzco que Andress no estaba en aquel entonces veraneando en Roma, sino que vivía allí, ya que desde que nació su único hijo Dimitri, fruto de su relación con el actor Harry Hamlin su vida transcurre en la capital italiana.

La foto no es demasiado nítida: me temblaba un poco el pulso y era una cámara noventera.    Me acerqué a ella, la saludé amablemente y aceptó que le sacara una foto y me dedicó hasta un corazoncito, debí de parecerle muy niña. Lo suyo hubiera sido que yo me hubiera puesto a su lado y que uno de aquellos hombres singulares que la acompañaban o algún miembro de mi familia (en lugar de observar mi hazaña con inquietud desde una apacible terraza romana) se hubieran ofrecido a retratarme junto a la diva, sin embargo no se dió así.

Todo ocurrió en cuestión de segundos y yo ni reaccioné a tiempo. Sólo se que le pedí que posara, ella accedió con una sonrisa y un "of course", se relajó el chaleco, se echó el pelo hacia atrás con actitud seductora y después de apoyar su mano izquierda en la parte trasera de la cintura, me lanzó un "ready" y yo me limité a hacer clik con la boca abierta.

12 comentarios:

  1. Que gran recuerdo Patricia. Se ve la belleza de esta mujer aunque sea poco nítida la foto. A mi me paso lo mismo con un cantante, fuí a su concierto en Barcelona y me lo encontre el día anterior al concierto en la calle, me cruce con el y no tuve por más que detenerlo y pararlo para hacerme una foto con él. Era el cantante de Incubus, majísimo, se hizo fotos, firmo autografo, de todo. Vaya fin de semana!! fuí con mis hermanas, que son las auténticas fans y se quedaron blancas. A una de ellas también le temblaba la mano al hacer la foto. Como somos, eh?

    Besotes

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  2. Guau!!! Para los que somos algo (o mucho) mitómanos, estos momentos son grandes e imborrables!! Yo salí una noche con Bardem y Tosar y creo que no lo olvidaré nunca, jejeje!

    Bicos

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  3. me encanta la historia!!! y la foto...
    besos!!

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  4. Una anécdota encantadora Patri que, por supuesto, me hubiera gustado vivir. Saludos.

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  5. Genial!!
    Vaya una buena casualidad!!!

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  6. Y como tú dices: posó seductoramente. Menuda era ella! ;-D Un detalle para el recuerdo. Un saludo, Patri

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  7. Gracias a todos/as por apreciar esta anécdota romana en mi vida!! Tenía ganas de compartirla y animo a que compartáis las vuestras. Yo me confieso mitómana y disfruto practicándolo!.
    Saludos!

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  8. Supongo que un momento así es como si se cruzase nuestra realidad con esa fantasía que supone el cine. En el caso de los hombres, la fantasía de Ursula Andrews hubiese sido aun mayor. En mi caso me hubiese gustado llevar la foto famosísima saliendo del agua y que me la dedicase.

    Bonita anecdota.

    Saludos

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  9. Mitomanía, cinefilia, amor al cine, etc, etc. Te advierto que es lo mejor que uno puede ser, porque el que ama el cine ama la vida (Truffaut)

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  10. Qué hermosa frase esa de mi idolatrado Truffaut, ethan. La comparto plenamente. La historia de la foto curiosa e interesante, Patri. Yo he tenido mala suerte en mis encuentros con los mitos. Han sido muy pocos y jamás he llevado la cámara encima.... Un saludo

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  11. Por cierto, mi padre tuvo la suerte de coincidir en un hotel (El Miramar de Málaga, en los años 60) durante unos días con Ava Gardner, y estuvo a su lado un par de veces, lo bastante cerca como para comprobar que el mito era muy bello en la realidad, aunque tenía unas tremendas ojeras.

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  12. Father, pides poco tu eh??!!! Gracias por pasarte de nuevo! saludos.
    Ethan, grande Truffaut! Los directores experimentales como el vivieron y viven con los 5 sentidos, yo lo intento!. Saludos
    Jota Pueblo, pues ahora con los móviles-cámara ya puedes estar a la busca y captura que esto no ha hecho más que empezar!! y lo de Ava Gardner, vaya experiencia y vaya dato lo de las orejas dumbo..jajaj aunque en mi avatar están tapadas por el pelo desde luego es que no se puede ser tan perfecta!. Un saludo y gracias!

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